Isover recibe a la ministra de trabajo en sus nuevas instalaciones de Azuqueca de Henares

Isover ha recibido ayer la visita de la ministra de Trabajo en funciones, Magdalena Valerio, a las instalaciones de su nueva línea de producción de lana insuflada en su fábrica situada en Azuqueca de Henares (Guadalajara). Tal y como detallaron fuentes de la firma especialista en la fabricación de sistemas de aislamiento y climatización, “la puesta en marcha de esta nueva zona de trabajo ha supuesto una inversión de 6,7 millones de euros, mientras que ha contribuido a dinamizar la economía de la región al crear 17 nuevos puestos de trabajo que se suman a 450 trabajadores de la planta”.

Junto al alcalde, José L. Blanco, y al subdelegado de Gobierno en Guadalajara, Ángel Canales Cerrada, la ministra realizó el recorrido de la nueva línea acompañada de distintos representantes de Isover y de su matriz, el grupo Saint-Gobain: Jean-Luc Gardaz, CEO de los Países Mediterráneos (España, Italia, Portugal, Grecia, Marruecos y Argelia); Filipe Ramos y Antonio Joaquín Ramos, director general y director industrial de Placo® e Isover, respectivamente; y Joaquín Caso, máximo responsable de la fábrica.

Tal y como indicó Gardaz, “valoramos la visita de la ministra como un reconocimiento a todo el grupo por generar más de 5.000 empleos en todo el país”.

El nuevo producto que se fabrica en la nueva línea de producción, conocido como Insulsafe, es una lana de vidrio insuflada o proyectada que sirve para rellenar cavidades tanto en horizontal como en vertical (paredes y techos). Esta nueva solución contribuye a mejorar la eficiencia energética de los edificios.

El director general de Isover, por su parte, así como el de Placo® destacaron que “el compromiso de la marca por la innovación es constante y buena muestra de ello es esta nueva línea de producción de lana insuflada. Dicho compromiso también se refleja en un trabajo constante por lograr mejores productos que contribuyan a la sostenibilidad medioambiental y a fomentar la construcción sostenible”.

En concreto, la lana insuflada “atiende a una demanda del mercado de soluciones basadas en el desarrollo de la economía circular, ya que su fabricación se desarrolla aplicando los principios del ecodiseño. Éste se fundamenta en dos pilares: en primera instancia, minimizar la energía y materias primas utilizadas en el proceso de producción, gracias a que la lana Insulsafe se elabora con un 85% de vidrio reciclado. Esto permite generar un menor consumo de energía y cero residuos en el proceso industrial. En segundo lugar, maximiza el ahorro energético en la etapa de uso en el edificio, ya que las características técnicas de este aislante permiten minimizar el consumo de energía de los edificios con la consiguiente reducción de las emisiones de CO2, según los responsables de la compañía.

De esta manera, Isover ratifica su intención de alcanzar los requisitos del Acuerdo de París suscrito en 2015 enmarcado dentro de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, que obligan a la disminución de emisiones de CO2, además de contribuir a la economía circular y al ecodiseño.