El profesor Wolfgang Feist, fundador del Passive House Institute (PHI), ha estudiado en qué situación está la industria global de la construcción y cómo se puede proteger el clima desde este sector. En una rueda de prensa virtual organizada por ‘The International Passive House Association’, Feist ha analizado lo que la crisis del coronavirus puede enseñarnos sobre la protección del clima y ha anunciado que “todavía estamos a tiempo de actuar contra el cambio climático, no evitándolo pero sí aliviando sus efectos peligrosos”.
"De este modo, se reducen las necesidades de calefacción y refrigeración con un importante ahorro económico y, sobre todo, las emisiones contaminantes"
“Tenemos un gran problema: la emisión de gases contaminantes a la atmósfera. El daño es visible, pero parece que no es lo suficiente para hacernos reaccionar. Pasa un poco como con la crisis del Covid-19, cuando se detectaron los primeros casos a nadie le pareció importante. Hoy nos encontramos ante una pandemia mundial: cuando el daño es obvio, ya es demasiado tarde. En el caso de los gases de efecto invernadero, sucede lo mismo, el daño ya está hecho”. Sin embargo, Feist se siente optimista y cree que evitando dichas emisiones se podría revertir parte del daño.
Para ello, el experto ha analizado el caso de Alemania: “En los últimos 30 años ha habido mejoras significativas en eficiencia gracias a la tecnología y la ciencia. Si a esto le añadimos el aumento del uso de las energías renovables, comprobamos que hemos reducido en un 1,9% anual la parte no renovable del consumo de energía primaria; a este ritmo, se necesitarán 50 años para reducirlo a cero. Si aumentamos la eficiencia y las energías renovables, podemos reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera a casi cero en algunas décadas”.
Feist ha analizado lo que la crisis del coronavirus puede enseñarnos sobre la protección del clima
Por eso en el sector de la construcción se tiene en cuenta que, por ejemplo, el 30% del consumo de una vivienda corresponde a la calefacción, Feist ha afirmado que si se aplican ciertas medidas es posible reducir drásticamente la demanda de energía de los edificios. Dichas medidas incluyen los cinco requisitos básicos para obtener la certificación del Passive House Institute, que son:
“Si realizamos estas mejoras, podemos llegar a reducir el consumo de energía en un 80% en una vivienda rehabilitada y en un 90% en obra nueva. Esta recuperación de energía es un hecho demostrado científicamente, por lo que está en nuestras manos tomar medidas”. Feist ha incitado a utilizar energías renovables (energía fotovoltaica, eólica, etc.) para cubrir esa energía que todavía necesitamos en las viviendas pasivas. "También podemos evitar emisiones en los materiales de construcción sustituyendo los tradicionales por la madera o la paja”, en su opinión.
"Si se aplican ciertas medidas es posible reducir drásticamente la demanda de energía de los edificios"
“Todo el mundo en el sector de la construcción puede acceder a metodologías que proporcionan soluciones para la protección del clima, ayudan al crecimiento sostenible y promocionan la participación y el conocimiento”, ha afirmado.
Todo esto, sin un sobrecoste importante: “ahora mismo en Passivhaus nos encontramos con un coste adicional que se mueve entre el 3 y el 8% del total del presupuesto constructivo, aunque también tenemos ejemplos en los que el sobrecoste es cero. El líneas generales, y salvo excepciones, el gasto en la construcción de una casa pasiva suele estar entre los 1.600 y 2.800 €/m2, siendo el promedio de coste adicional en Alemania del 6%”.
Feist ha justificado que una casa certificada nos proporciona un aire mucho más sano y limpio gracias a la ventilación mecánica con recuperación de calor. “Algunos han empezado a hablar de la ventilación higiénica, es decir, que existe suficiente aire limpio y no recirculado del exterior, que además está filtrado –ha apuntado el físico-. Lo más interesante es que esto es exactamente lo que el criterio de certificación Passivhaus ha contemplado desde sus inicios: la ventilación con recuperación de calor es la gran contribución a la salud y el confort de las personas, es la única razón por la que se instala un sistema de ventilación, por la salud, no el ahorro de energía. Aún así, cabe remarcar que una maquina de ventilación casi no consume y, además, transporta el aire limpio mejorando la calidad de aire interior y ahorrando alrededor del 90% de energía, que se perdería ventilando de forma tradicional”.
Otras de las medidas que han tomado importancia durante la pandemia son, por un lado, el aislamiento térmico, ya que “si hay filtraciones de aire, podrían introducir el virus dentro de la vivienda. Por el otro, la cuestión del confort; si existe un problema con el suministro de energía, una vivienda pasiva está preparada para mantenerse confortable durante 10-15 días, y en algunos casos incluso más”, tal y como detalla el experto.
Soluciones accesibles
Desde 1996, el Passive House Institute se ha esforzado para hacer que estas soluciones sean accesibles y se puedan implementar con facilidad. El éxito del estándar Passive House se basa en su estrategia efectiva de eficiencia energética, garantía de calidad y versatilidad. Se puede aplicar a todo tipo de edificios como escuelas, piscinas, rascacielos, viviendas unifamiliares, etc. Si bien el estándar se desarrolló para nuevas construcciones, el PHI también ha desarrollado el estándar EnerPHit, para rehabilitaciones altamente eficientes, y un sistema de clasificación Passive House que incluye Passive House Classic, Passive House Plus y Passive House Premium, para apoyar el integración de energías renovables.
"Gran parte de las empresas del sector podrían tener un papel importante en la reactivación de la economía tras la crisis del Covid-19"
Gran parte de las empresas del sector podrían tener un papel importante en la reactivación de la economía tras la crisis del Covid-19 pero, en palabras de Feist, “es una decisión del propio sector. Muchos de ellos se niegan a adoptar los estándares de sostenibilidad y quieren seguir construyendo a la vieja usanza. Queremos conseguir el compromiso de una parte del sector que sí que está implicado en un cambio hacia la sostenibilidad. El sector de la construcción podría ser el motor de la economía si una mayoría optase por el camino de la sostenibilidad”.
Feist ha evocado que “al fin y al cabo, las medidas sostenibles son inversiones económicas y crean empleos, muchos empleos. Al contrario de cualquier acción que se imponga si actuamos demasiado tarde (prohibición de viajes y de vehículos de com- bustión interna, etc.), estas medidas de eficiencia energética que promovemos tienen un impacto positivo en la economía. Además, conllevarían una mayor producción local”.
"La crisis climática y el coronavirus han evidenciado los beneficios para la salud, el medio ambiente y la economía de las viviendas pasivas"
Wolfgang Feist ha subrayado que “es sencillo empezar un negocio de eficiencia energética, especialmente en el sector de la construcción, porque puede y debe desarrollarse en medianas y pequeñas empresas, solamente hay que tener el Know How. Y nosotros podemos dar esta formación. Por ejemplo, cuando llegamos a China muchos dudaban de la calidad del sector de la construcción, pero impartimos cursos y formamos a los profesionales solamente dos días antes de empezar la obra. Me sorprendió mucho la capacidad, habilidad y rapidez con la que aprendieron. Los resultados son excelentes”.
Directiva de Eficiencia Energética Edificios
En relación a la Directiva de Eficiencia Energética Edificios, Feist ha explicado que “la Comisión Europea no tiene la autoridad de hacer una ley sobre eficiencia energética en edificios, así que ha delegado esta tarea a las naciones y cada una de ellas ha creado sus propias herramientas de cálculos, no se pueden comparar. El problema es que estas herramientas están muy influenciadas por los lobbies de cada país”. En este sentido, el fundador del Passive House Institute ha destacado el trabajo de países como Luxemburgo, Dinamarca o Suecia. “Alemania ha introducido nuevos estándares de eficiencia pero todavía nos queda mucho por hacer, en la actualidad nos situamos al nivel de Suecia en los años 80. Estamos décadas atrás de los países escandinavos”.
Sobre el Pacto Verde Europeo, que contempla medidas para luchar contra el cambio climático como la reducción de emisiones y residuos, la renovación de los edificios para mejorar la eficiencia energética y protección de la biodiversidad y ecosistemas, entre muchas otras, el físico alemán ha señalado que “es una gran oportunidad para transformar la sociedad hacia un desarrollo sostenible que conlleve, además, una mayor producción local. Existe un firme compromiso por parte de Europa”.
"La ventilación a través de un sistema de recuperación de calor significa que los edificios pasivos mantienen una cantidad continua de aire fresco y filtrado y una temperatura interior confortable"
“Ahora necesitamos soluciones en el sector de la eficiencia energética y las energías renovables, necesitamos invertir tanto en ellas como se está invirtiendo en la fusión nuclear porque esta última no está probado que funcione, las renovables sí. Europa ha apostado por ellas en el Pacto Verde Europeo y puede tener mucho éxito, pero necesita el compromiso de las personas”, según Feist. Y es que todos y cada uno de nosotros podemos contribuir a revertir la crisis climática. En este sentido, Feist ha explicado que “tenemos que conseguir el compromiso de las personas, más allá de la empresa, más allá de una compañía. Siempre habrá gente que lo único que le interese sea el dinero, venga de donde venga. Necesitamos tomar decisiones, ser parte de este desarrollo positivo, porque el cambio climático está matando gente”.
“Ahora sabemos que, si no tomamos medidas, el nivel del mar a finales de este siglo podría incrementar en 50 centímetros; esta sería solamente una de las consecuencias del cambio climático, habría otras como grandes desertificaciones, sequías, vientos fuertes... todo esto podría crear problemas severos en las poblaciones, que llevaría a su vez al surgimiento de conflictos. Para evitarlo, el cambio tiene que ser global e inmediato, disponemos de unos 50 años para alcanzar un futuro sostenible sin demasiados problemas. Este futuro incluye edificios energéticamente eficientes con un porcentaje abrumadoramente alto de energías renovables, así como un sector de transporte sostenible”, en su opinión.
Tal y como explica el propio Passive House Institute (PHI), la contribución de las viviendas pasivas a la ciencia está ampliamente documentada, pero la crisis climática y el coronavirus han evidenciado sus beneficios para la salud, el medio ambiente y la economía. La ventilación a través de un sistema de recuperación de calor significa que los edificios pasivos mantienen una cantidad continua de aire fresco y filtrado y una temperatura interior confortable. Esto, junto con otros componentes constructivos de alta calidad como ventanas, aislamiento óptimo y ausencia de puentes térmicos, significa que los edificios pueden confiar en técnicas pasivas para su climatización. De este modo, se reducen las necesidades de calefacción y refrigeración con un importante ahorro económico y, sobre todo, las emisiones contaminantes. Como los edificios tienen una baja demanda energética, esta puede satisfacerse fácilmente usando energías renovables generadas localmente.
Recordamos al lector que el Passive House Institute, con sede en Darmstadt (Alemania), es un instituto de investigación independiente que promociona y controla el uso altamente eficiente de la energía en los edificios. El instituto, fundado en 1996 por Wolfgang Feist, ocupa una posición de liderazgo internacional con respecto a la investigación y el desarrollo en el campo de la construcción con eficiencia energética. El PHI organizará su conferencia anual, prevista para el mes de septiembre en Berlín, a través de la página web aquí.
Entrevistamos a Ana Isabel Sánchez, responsable de Ventas de Exportación de Luymar, quien destaca cómo la nueva Directiva Europea de Eficiencia Energética ha fortalecido su posición en mercados internacionales, ya que, a pesar de los desafíos regulatorios y competitivos...
La compañía Arco ha anunciado un plan de acción integral para apoyar a los afectados por la dana en la Comunidad Valenciana. Dada la situación de gravedad derivada del paso del temporal, que ha dejado graves pérdidas personales y daños materiales en la región...
Eurofred amplía su gama aerotérmica para climatización y suministro de ACS de alta eficiencia con el lanzamiento de Aquatank Neo, de Daitsu, un acumulador de ACS diseñado específicamente para maximizar el rendimiento de las instalaciones con bomba de calor.
El club de golf Finca Cortesín Golf Club, en Casares (Málaga), ha acogido la celebración de la Mitsubishi Electric Champions Cup. El torneo de golf ha contado con la presencia del golfista profesional malagueño Miguel Ángel Jiménez, embajador global de la marca.
Trane ha presentado la RTSF HT, una bomba de calor agua-agua de alta temperatura capaz de proporcionar agua caliente hasta 110 °C, que amplía la cartera de bombas de calor agua-agua y enfriadoras compactas Trane City.
Panasonic Heating & Cooling Solutions presenta sus nuevas unidades interiores Jet Air Stream para PACi NX, diseñadas para ofrecer soluciones de climatización avanzadas y energéticamente eficientes en grandes espacios como almacenes, fábricas y gimnasios.
LG Electronics presentará sus novedades a través de su Roadshow HVAC, que se celebrará entre los días 29 de noviembre y 16 de diciembre de 2024 en ocho ciudades de España. El camión con las últimas soluciones de la compañía parará en...
Frigicoll, compañía distribuidora en exclusiva de las soluciones de climatización de Midea en España y Francia y de la gama de electrodomésticos de Midea en España, y el Sevilla FC han llegado a un acuerdo para que la marca...
La zonificación de la calefacción permite ahorrar hasta un 15% en consumo con tan solo calefactar las estancias donde se necesita, cuando es necesario y en el momento adecuado.Por ello, Delta Dore lanza la válvula termostática TRV...
Fegicat ha presentado las primeras tres Guías de Aplicación Práctica (GAP), documentos técnicos y accesibles destinados a estandarizar procedimientos en áreas clave de las instalaciones y a promover una mayor profesionalización en el sector.
Comentarios